CAPITULO 0

"El whisky refleja la vida con un tono cálido"


-¿Quién piensa que le vaya a llamar durante el viaje, que no lo haya hecho ya durante el transcurso de sus fútiles vidas?


Se lamenta mirando a un petimetre sentado delante de él, que, mientras el avión se dispone a despegar, revisa sus mensajes del móvil.


Se queja, y es que pese a su frialdad con ciertos temas, es su estado natural. Bueno, sobretodo, con eso que él considera la "estupidez":  le revuelve el estomago.


-¡Joder! hace que eche de menos mi úlcera.


Vuelve sobre el párrafo tres veces ojeado pero ninguna leído. Lee cómo Pepe Carvalho habla con Charo sobre la revolución. La novela es "La rosa de Alejandría". Le gusta. Bueno, cualquier novela basada en su negocio le emociona. Se compara, ve los trucos y la inventiva del autor. Pero sobretodo son los casos, esos buenos casos como los que tenía él antes. Los echa de menos. Durante esos años escupía en la cara a la desgracia… hasta aquel día.


El avión en el que va, está camino de Barcelona. Un personaje de esos que nos acompaña como el carnet de identidad, alguien de esos con los que compartes apellido, le ha llamado para ofrecerle un nuevo trabajo, seguramente movido por esa mezcla de compasión y obligación que conlleva la familia. No sabe si lo aceptará. Si es un caso, seguro que no; no se siente capaz desde entonces.


Llega a Barcelona. Es Lunes. Diez de la noche. Como el que mira una pecera, observa Barcelona desde el taxi. Parece un desierto. Al fondo de la calle una pareja la cruza corriendo, como gatos, entre los coches. Aquí es normal, esto no es el autoservicio 24 horas que es Madrid, y más aún en el populoso barrio de Zona Franca, donde se encuentra.


Cuando iba a coger la Calle Aluminio, una rata grande cruza delante del taxi. El taxista se siente en posición de aseverar:
-Esto antes no ocurría. Esto es por culpa de la crisis.
La genial ocurrencia le hace revolverse en el asiento.
-Antes comían de restaurante, supongo…
Silencio.
-Lléveme mejor a un hotel por aquí cerca, pero que me dé tiempo a acabarme el cigarro.


Decide no visitar a su familia hoy: respeta su vida monacal. Cuando le paga la carrera, no olvida la propina por dejarle fumar.


Se aloja en un hotel cerca de la plaça Cerdá. Tiene categoría, tras el “chek in”, su prioridad no es la habitación.


-¿Tienen cerrado el bar?
- Me temo que sí, caballero
-¿Dónde me pueden servir un whisky?
-Si quiere, el servicio de habitaciones está a su disposición
-No, no se preocupe… Me lo tomaré ahí mismo.
-Pero señor ese es el sofá de la recepción.


Le mira y sonríe. Y como el que descubre la pólvora por enésima vez.


-Seré una especie de preludio para los turistas, el prólogo de una gran noche, ¿eh?


Sin esperar respuesta, antes de sentarse.


- Etiqueta negra, tres dedos.


No hay ruido. El chico de la recepción disimula su sueño dando grandes cabezazos. Y mientras, observa en el vaso como se reflejan los volúmenes del hall en la bebida. El whisky refleja la vida en tono cálido. No sabe que hace ahí, en Barcelona. Él sabe que no está preparado para coger un nuevo caso. No, todavía no.


-Sr. Jiménez, si no va querer nada más igual es buena idea que suba a la habitación.


-Llámeme Casto.


Vencido, se dirige hacia el ascensor.

- Súbame una botella y un vaso.

1 comentario:

  1. Mola..mucho; lo de la úlcera asociada a la profesión es muy recurrente en los escritos sobre el género,pero no por ello menos cierto.

    Esa sensación de fracaso a flor de piel,soledad intrínseca, que bien narrado Pablo...

    "Le mira y sonríe. Y como el que descubre la pólvora por enésima vez.

    -Seré una especie de preludio para los turistas, el prólogo de una gran noche, ¿eh?

    Sin esperar respuesta, antes de sentarse.

    - Etiqueta negra, tres dedos."

    Me ha recordado a Hammett, en su estilo, me ha sabido a poco, ya no puedes dejarlo ahí porque ha sido un acierto, quiero más¡¡¡¡ no me digas que lo escribiste en un rato, mientras esperabas un avión tu también, o mientras esperabas el bus, porque me da igual...búscate otro rato si es así...y escribe.

    FELICIDADES¡¡

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